En Primer Lugar Remoto

Soy de la época de términos como “internet-first”, “web-first” y “mobile-first”. Generalmente, la industria de la computación comienza a poner un adjetivo, como “first”, en momentos de transiciones tecnológicas, y luego “first” se sale de término.

Por ejemplo, hace poco más de una década, la gente empezó a decir que las aplicaciones deberían desarrollarse de una manera “mobile-first”. ¿Que significaba eso? Significaba que en lugar de desarrollar una aplicación con la mentalidad de que esta aplicación debía ejecutarse en la web (en navegadores, o browsers, como más se conocía en ese momento), estas aplicaciones debían pensarse con la mentalidad de desarrollar primero para los dispositivos móviles y, como segundo plano, para la web. Por eso “mobile” (teléfonos móviles), “first” (primero). También fue en ese momento que comenzamos a llamar a los softwares de aplicaciones, en lugar de programas, porque el término en inglés “App” comenzó a usarse más. También fue en este momento que nacieron las tecnologías de diseño de respuesta, que permitieron este pensamiento de “celulares primero” y tecnologías híbridas para el desarrollo de aplicaciones.

Hoy en día, incluso es gracioso que alguien diga “mobile-first”, porque, por supuesto, tiene que ser móvil. Por lo tanto, los adjetivos desaparecerán con el tiempo.

También existe el término “mobile-only” cuando la persona quiere decir que la aplicación se ejecutará “solo” en el teléfono celular, pero hay pocos casos en los que esto sucede. En la gran mayoría de los casos, las aplicaciones deben ejecutarse en todas partes, en el móvil, en la web, en el escritorio, en la tableta, en el reloj, en la TV, en Echo (Alexa), etc.

Bueno, ahora estamos escuchando mucho sobre el término “remote-first”.

La mayoría de las veces, la industria informática, especialmente el área del software, está a la vanguardia de los desarrollos tecnológicos de la sociedad. Ya habíamos estado experimentando con el trabajo a distancia incluso antes de la pandemia, pero eran iniciativas más pequeñas, poca gente en este formato y una minoría de empresas. No hace falta decir que hoy, un año después del inicio de la Pandemia, el trabajo remoto (e incluso el “home-office”, la oficina en casa) ya no es la minoría, sino la mayoría. Visionnaire trabaja con cientos de clientes y ya ha implementado miles de proyectos con éxito en producción. En el último año pudimos observar una migración cultural, poco a poco, de nuestros clientes permitiendo el trabajo a distancia. Antes esto era un mito, hoy es una “real” realidad.

Visionnaire, antes de la Pandemia, tenía entre el 10% y el 20% de sus empleados trabajando de forma remota. Hasta entonces, estábamos viendo algunas empresas en Silicon Valley que ya eran 100% virtuales con empleados en varios países, y pensábamos: “¡Qué increíble, qué genial!”. Bueno, hoy Visionnaire ha estado con empleados 100% remotos durante mucho tiempo. Como dicen, la Pandemia fue el mayor impulsor de la Transformación Digital para todas las empresas, todo lo que sucedió en el sector tecnológico en el último año iba a pasar de todos modos, sería la evolución natural de las cosas, solo que sucedió en un año que probablemente tardaría unos cinco años.

Desde los primeros meses de la Pandemia, en 2020, Visionnaire ya había cambiado su política corporativa para que los empleados pudieran elegir entre oficina remota o física de la empresa. La mayoría optó por el remoto. Hoy hemos actualizado la política para fortalecer aún más el trabajo a distancia. Podríamos decir que Visionnaire en la actualidad es una empresa “remote-first”, probablemente avanzando hacia “remote-only”, y tal vez en el futuro, simplemente “remote”. ¿Nos resultará gracioso en el futuro cuando alguien diga “remote-first” porque es obvio que la gente trabajará desde cualquier lugar?

Ciertamente sabemos que no a todos los sectores les resulta fácil tener a sus empleados trabajando de forma remota, en algunos casos esto es casi imposible, pero una vez más las empresas del sector tecnológico están liderando el camino, ya que les resulta más fácil permitir el trabajo 100% remoto, ya aprenden de las dificultades iniciales de este formato y abren puertas para mostrar a empresas de otros sectores cuáles son las mejores prácticas.

Para que una empresa pueda funcionar de manera productiva con el 100% de los empleados trabajando de forma remota, debe ser muy disciplinada. Desde tiempos pasados, cuando leí sobre empresas 100% virtuales, una cosa que estas empresas enseñaron fue unánime: tener todo documentado, todos los procesos bien definidos y por escrito. Para nuestra sorpresa positiva, Visionnaire ya tenía procesos muy bien estipulados y documentados antes de la Pandemia, y lo que hicimos en los primeros meses de la transición a remoto fue actualizar, complementar y mejorar todos estos procesos. Otra cosa es tener disciplina, rutinas, organización. Ya teníamos rutinas bien definidas, ya habíamos migrado nuestros sistemas de software a la nube, ya seguíamos la filosofía Scrum con sprints semanales o quincenales, por lo que transformar la operación de la empresa al mundo remoto era natural. Lo que aprendimos es que en este tema de rutinas y disciplina la empresa se comporta como una persona, si la persona ya tiene buenas prácticas para su vida, buena disciplina y buenos hábitos, seguramente tendrá más probabilidades de tener una vida larga y próspera, preparado para las posibles adversidades e imprevistos de la vida.

Por lo tanto, podemos decir hoy con una gran seguridad, Visionnaire es una empresa que es “En Primer Lugar Remota”, avanzando hacia “Solo Remota”, pero en el futuro será simplemente... “Empresa”. :-)

Sergio Mainetti Jr. es Director y Cofundador de Visionnaire.